El gobierno del primer ministro Víktor Orban de Hungría anuncia que el país iniciará el proceso de retiro de la Corte Penal Internacional (CPI). Gergely Gulyas, jefe de la oficina del primer ministro, ha señalado preocupaciones por la politización del órgano.
El gobierno húngaro argumenta que nunca incorporó formalmente el Estatuto de Roma de la CPI en su derecho nacional, lo que significa que las decisiones de la corte no podrían haber sido aplicadas dentro del país, al menos antes de la ansiada retirada.
La decisión del gobierno húngaro surge en tanto que la CPI ha emitido órdenes de detención contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu.